• El concejal del Partido Popular de Pontevedra y responsable del área deportiva, Guille Juncal, ha explicado que todavía no se han iniciado los trámites para dotar de corriente eléctrica a este espacio, algo imprescindible para empezar las obras
• Los populares, con Rafa Domínguez a la cabeza, acudirán mañana a la manifestación convocada por la SCD Salcedo, el segundo equipo más antiguo de la ciudad, para requerir la construcción de estas instalaciones deportivas

El Partido Popular de Pontevedra vuelve a insistir en la necesidad de dotar a la Sociedad Cultural Deportiva Salcedo, fundada en 1947 y segundo equipo más antiguo del municipio, de unas instalaciones deportivas para el desarrollo de su actividad. La Mancomunidade de Montes cedió al Concello en 2020 unos terrenos para la construcción de un campo de fútbol y, después de dos años, «la parcela sigue exactamente igual que entonces a pesar del compromiso por parte de la Concejalía de Deportes de que para esta temporada las instalaciones ya estarían disponibles».

“Es evidente que los vecinos de Salcedo no podrán contar con el campo de fútbol para esta temporada”, ha recalcado el popular. A día de hoy, todavía no se han iniciado los trámites para dotar de corriente eléctrica a este espacio, algo imprescindible para dar comienzo a las obras. Juncal urgirá en el próximo Pleno municipal el inicio de las obras y que se comience “a tomar en serio a los vecinos y usuarios con los que existe el compromiso de esta obra”.

Los populares, con Rafa Domínguez a la cabeza, acudirán mañana (19.30h) a la manifestación convocada por la SCD Salcedo, el segundo equipo más antiguo de la ciudad, para requerir la construcción de este espacio. “Esta manifestación es prácticamente extensible a la totalidad de los clubes deportivos de esta ciudad, que están sufriendo una gestión deportiva municipal deficiente, precaria y que no sigue ningún tipo de criterio objetivo, público y unánime”.

Juncal ha recordado que no es la única obra de esta concejalía que experimenta retrasos y ha puesto como ejemplo el campo de fútbol Manolo Barreiro, que este mismo año y en plena temporada se cerró hasta en dos ocasiones como consecuencia de las obras de renovación del césped artificial, a pesar de la petición del PP de que se hiciese a final de temporada.