• El concejal está en contacto con los propietarios, quienes han confirmado que han acudido a los Juzgados: “Suscribimos su interés en paralizar las obras por no haber acuerdo y los desperfectos. Rechazamos la falta de diálogo del BNG”
• “El Concello no está a la altura de la obra, y todavía peor, incumple la Ley. La alteración de la fachada por un propietario debe ser aprobada por el vecindario, al ser un elemento común, y el Ayuntamiento no tenía autorización para hacerlo”
• Fernández ha anunciado su intención de llevar a la comisión pertinente el asunto: “Lo que no podemos permitir es que como particular se te pongan todas las trabas del mundo para realizar una obra y el Concello tenga vía libre para ello”

El concejal del Partido Popular de Pontevedra Pablo Fernández ha criticado “la falta de ejemplo y consideración” del Concello con la comunidad de propietarios del edificio de la calle Herreros 28, al cual el organismo municipal trasladará las oficinas municipales de Urbanismo y Tesorería: “Entendemos que los vecinos hayan acudido a los Tribunales para exigir a la Administración local responsabilidades por una obra que se ha realizado sin permiso de los vecinos, una actuación en la que se ha alterado la fachada y ha afectado a elementos comunes del inmueble”. Fernández ha puesto de manifiesto que en el artículo 17.6 de la Ley de Propiedad Horizontal se recoge que la alteración de la fachada por un propietario debe ser aprobada por la unanimidad de los vecinos del edificio y, en este caso, “el Concello ha actuado de manera unidireccional, sin permiso, causando grietas y humedades que ya constan en el informe pericial que ha encargado la comunidad”.

“Concuerdo con los vecinos en que se trata de un atropello injustificable. A cualquiera de nosotros, al solicitar el permiso para realizar una obra se te exige toda la documentación pertinente, como es normal. En cambio, el Concello campa a sus anchas y hace lo que quiere saltándose las normas que luego requiere para los demás”, ha denunciado Fernández, que ha pedido al Ayuntamiento que le explique a los “comerciantes de Pontevedra por qué a ellos se les retrasas en incontables ocasiones la licencia de apertura y en cambio la Administración local no atienda a razones y se salta las normas”.

“La falta de diálogo del BNG con los vecinos es impropia de representantes públicos. Esta alteración de la fachada por el Concello, copropietario, debería haber sido solicitada a la comunidad, que debería haber celebrado una Junta con ese punto concreto dentro del Orden del Día, y así ser aprobada por unanimidad”, ha explicado Fernández, que ya ha mostrado su intención de llevar este tema a la próxima comisión informativa pertinente para que el Concello de las “explicaciones, ya que no han contestado a los doce escritos que han presentados los propietarios”. El popular ha podido comprobar los daños estructurales en el edificio en una reunión que ha mantenido con los vecinos, los cuales le han mostrado toda la documentación recopilada por los mismos, en la que se incluyen denuncias a la Policía y la documentación que acredita los desperfectos.